Río Negro firmará mañana un convenio con Nación para acceder a un crédito por 625 millones de pesos, destinados a la conclusión y la entrega de 36 barrios, con 2.071 viviendas, distribuidas en una veintena de localidades.
Por diferentes programas, el IPPV requirió ese préstamo del Fondo Fiduciario Federal para la ejecución de infraestructura y las redes de servicios en diferentes complejos habitacionales en construcción. La provincia no puede cumplir con ese financiamiento y, exclusivamente, Nación ofreció este crédito a 8 años.
Mañana, a las 12, en Interior, se firmará el convenio de “Asistencia Financiera” de ese Fondo a Río Negro, según confirmó el representante de ese ministerio en la provincia, Juan Martín.
Las prometidas transferencias nacionales serán importantes para la reactivación de esas construcciones ya que algunas estaban directamente paralizadas o con bajo nivel de ejecución, incluso aquellas con un alto porcentaje de ejecución pero restando sus obras de infraestructura y redes.
Igualmente, al proceso todavía le falta trámites. Ocurre que la provincia no recibirá un desembolso de los $ 625.580.382 acordado sino que el IPPV deberá requerir y presentar documentación por cada uno de los proyectos incorporados en el plan de financiamiento. Hay barrios con un nivel de construcción del 90% aunque la mayoría ronda del 40% al 60%.
La opción crediticia fue acordada entre el gobernador Alberto Weretilneck y el ministro Rogelio Frigerio en octubre pasado cuando el funcionario le ratificó en Viedma que era el único financiamiento nacional posible. Luego, el IPPV puso en marcha la tramitación y, en diciembre, no faltaron los cruces por los atrasos. Su titular, Jorge Barragan responsabilizó por los tiempos a Nación y Martín le respondió que “el IPPV tiene un récord de demoras administrativas”, resaltando que el gobierno de Mauricio Macri “está preocupado por garantizar el acceso a la viviendas”.
La último presupuesto de Río Negro -ley 5.173- ya comprometía parte de los fondos coparticipables para acceder al crédito que mañana se formalizará en Casa Rosada. El monto programado incluye “los gastos de auditorías y administración”. El plazo de devolución será de 8 años, con un año de gracia. Se exige que el IPPV formalice en seis meses sus obras para finalizar y el inicio de su ejecución en un año.
Cipolletti y Bariloche concentran la mayoría de las viviendas incluidas, con 1.158 unidades, es decir, el 55% del total. Lo siguen Allen, Conesa, Cinco Saltos y San Antonio.
De las 2.071 viviendas, 1.436 corresponden a planes de Techo Digno firmados originalmente los municipios con Nación pero que, posteriormente, ya en el gobierno de Cambiemos, los gobiernos locales lo cedieron al IPPV para su conclusión. El instituto, también, incorporó en este programa 625 unidades de convenios de Techo Digno rubricados por la provincia (Plan 600 y Plan 200).
