Considerada la mejor arquera de fútbol femenino del mundo, Hope Solo habló de las “distracciones” y de lo que se bebe durante la competencia olímpica.
No sólo entrenamiento de alta competencia es lo que viven los atletas. La diversión, el sexo y las bebidas también se dan cita en la Villa Olímpica.
Al menos así lo confesó Hope Solo, la arquera de la selección norteamericana de fútbol femeino, y considerada como la mejor del mundo.
A días del comienzo de los Juegos Olímpicos de Londres, la guardiana de los tres palos del arco de los Estados Unidos admitió que en la Villa Olímpica “hay mucho sexo”, incluso “al aire libre”.
“La Villa Olímpica puede ser una distracción. Los atletas son extremistas. Cuando entrenan, entrenan al máximo. Cuando salen a beber, beben veinte copas” , dijo Solo.
“Como es un experiencia única, todos quieren tener muchos recuerdos, ya sean sexuales, en las fiestas o en las competiciones. Hay mucho sexo. He visto gente manteniendo sexo al aire libre, en el pasto que hay entre los edificios”, confesó Hope.
Hope brilló en el último Mundial de fútbol femenino en Alemania. A pesar de haber caído en la final por penales ante Japón, ella se llevó el Guante de Oro, premio a la mejor arquera de la competencia.