La pasada semana se presentó un recurso para evitar la subasta de la
sede de la liga Avellaneda, y una parcela del club Darwin, que habían
salido a subasta pública por orden judicial.
La presentación se realizó a razón que existe una ley que protege a estas
instituciones, dado que se trata de espacios donde funcionan las mismas y en
las que se fomenta la actividad deportiva, tanto en jovenes como en niños.
El embargo se origina a raíz de un juicio de daños y perjuicios, que inició un
jugador y que obtuvo sentencia favorable hace algún tiempo y que al no haber
obtenido los pagos, se ejecutan los inmuebles correspondientes a la sede de la
liga avellaneda, un predio de Darwin y está próximo a salir a subasta
instalaciones del club Chimpay.
Desde la liga se introdujo un recurso pidiendo a la jueza que modifique su
decisión teniendo en cuenta que existen leyes que protegen a este tipo de
instituciones sin fines de lucro. Cabe recordar que este pedido guarda relación
con los remates solicitados, no así con los hechos que ocasionaron que se
llegue a esta instancia, sobre los que ya existe sentencia firme.
Quien patrocina a la liga y al club Darwin, expresó en los microfonos de radio
municipal de Beltrán, que se estima que antes de fin de año la jueza se expida
sobre esta situación, pero que el tema podría no finalizar allí, dado que aún
quedan instancias de apelación que se pueden llevar adelante por ambas partes.